Katze
Si bien es cierto, el futbol une corazones, sentimientos, pasiones, aficiones, pero sobre todo, une personas.
Les contaré una historia que todas en algún momento de nuestras vidas pasamos. Yo insisto en que nacemos con un color y una camiseta adherida a nuestro ser, que justo cuando despierta, nace esa necesidad de saberlo todo respecto a tu equipo. Cuando eres adolescente y joven, además de tu equipo, te interesan las contrataciones, los partidos, haces hasta una lista de los partidos que tocan en tu ciudad y organizas citas con amigas para ir a los juegos; te preparas física y psicológicamente para el inicio de temporada, ves el uniforme, compras tus boletos o si puedes los apartados del palco. Juntas a tus amigas y chismean sobre todo lo relacionado hasta las porristas que seguirán en el equipo, claramente en esos tiempos tu interés mágicamente se va a los jugadores, quién llega, quién se va .. y he ahí en donde comienzan otras historias…
La primera vez que yo conocí a mis amigas fue en un entrenamiento, hagan de cuenta las chicas de Sex & City, pero en lugar de estar muertas por las compras , estaban muertas por los entrenamientos y los jugadores, jajaja. Si alguien de todas ustedes amigas pamboleras me dice que nunca imaginó una vida rosa en la que el final incluía una boda en la cancha de su equipo con seguridad les diré que mienten.
Yo crecí con el futbol, mi padre jugaba futbol, mi hermano jugaba futbol , iba cada semana a ver jugar a mi papá a la gloriosa ciudad Cruz Azul, hasta que crecí y nos cambiamos al D.F, pero ¡oh sorpresa!, mi equipo estaba aquí y podría seguir disfrutando todo sobre él , ahora por supuesto incluyendo a mis hormonas y mis locuras, pero ese día qué les cuento, me encontré con 3 chicas que compartían además del mismo gusto que yo, la misma pasión y el mismo espíritu aventurero.
Claro cuando llegas al primer entrenamiento y sientes que todo mundo te ve y dice «¿y ésta loca que hace ahí parada?» te sientes el bicho raro del lugar (después te acostumbras, jaja), hasta que además encuentras compañeras de travesuras e ideas nuevas, compartes quién le gusta a quién, a quién va a ver cada una , etc… ¡Ahhh! Pero después viene el complemento, porque luego de por lo menos haberlos saludado a cada uno como 20 veces, hay algo en tu cabeza que te dice «oye, ¿ pero no hace falta algo?» .
Acto seguido, por arte de magia, empiezas a trazar el plan estratégico de cómo investigar en donde viven , donde comen , cuando llegan a la concentración, que les gusta , que no les gusta , claramente si están casados o no, en fin te conviertes en un investigador más que privado, bueno ni la CIA te gana , porque además lo haces en conjunto, reúnes información.
Con el tiempo sigues asistiendo a los partidos , a los entrenamientos a las concentraciones, pero ojo, porque no sólo por los jugadores, ahora también te interesa que jueguen y verlos de titulares claramente , así que te inventas una y otra alineación hasta que los ves en un punto correcto, hablas sola, te metes a la cancha o al televisor si es que no fuiste al estadio, hablando de estadios hasta ahorras todo el dinero que puedes para irte a los partidos a otros estados ( sí es una inversión bastante fuerte, jajaja).
Pero como todo aún y dentro de ti, sabes que tu ilusión es una ilusión, eres feliz, disfrutas esos momentos como nunca porque sabes que eres parte del equipo , te sientes feliz de haberlos visto un fin de semana y porque además lo compartes con tus amigas. Sí, muchas veces escucharán palabras como «esa vieja está loca. ¡Cómo puede pensar que ellos la ven y más que la conocen!». Amigas mías, créanlo, nada es imposible, nada está escrito y es más, tengo un amigo que así conoció a su esposa. Claramente no todas tendrán la misma suerte o ese final pero es una ilusión, un sueño que son libres de vivir y que día a día las hace ser más felices y si no le hacen daño a nadie, qué más les da lo que digan de ustedes.
De tantas memorias y recuerdos que tengo de mis tiempos de pambolera activa puedo decirles sin duda, que más allá de mis loqueras, aún conservo amigas que sé comparten conmigo la misma pasión de antes y siguen siendo fieles a sus equipos aún y por quien hayan llegado ahí ya no esté , los ciclos terminan, los torneos van y vienen , se podrán llamar Apertura, Clausura, podrán tener la mitad o todas las fechas. la única ficha técnica que seguirá intacta es la de sus amigas que siguen ahí pase lo que pase.
Desde hace tiempo venía recordando con ellas esos momentos y les dejo esta pequeña semblanza de nuestras aventuras,si quieren saber más, pídanlo.
Saludos a todas y sigan amando el futbol.
Por cierto… «Mi corazón es rojo y mi sangre es azul «